Ginebra (Suiza).- El stand de Mazda en el Salón del Automóvil de Ginebra de este año es más verde que nunca. Una de las líneas que Mazda ha explorado para ello ha sido el desarrollo de una tecnología de corte de ralentí, que apaga el motor cuando el coche está parado en atascos y situaciones similares, consiguiendo de este modo reducir el consumo de combustible.
El nuevo sistema de autoarranque diseñado por Mazda funciona de forma diferente a los empleados por otras marcas como Mercedes con el Clase A, Peugeot 308 STOP&START o el Toyota Auris. Mientras que tradicionalmente, el sistema utilizado por primera vez en el Citroën C3, se emplea el motor de arranque para encender el propulsor tras una parada, en un semáforo por ejemplo, Mazda inyecta gasolina directamente sobre la cabeza del pistón, que gracias a la temperatura residual del motor, se enciende y se activa de nuevo. Este sistema resulta más rápido, 0,35 segundos, y silencioso que el método convencional.
Pero las novedades orientadas a reducir el consumo del modelo más verde de Mazda no se quedan sólo en el sistema i-stop. Gracias al corte de ralentí, el nuevo motor DISI y la modificación de la aerodinámica, el consumo se ha reducido un 14% aproximadamente, situándolo en 6,8 l/100 km. Supera la normativa Euro5.El Motor empleado es el DISI (inyección directa con encendido por chispa). Tiene dos litros de cilindrada con doble árbol de levas. Ofrece una potencia de 151 CV a 6.200 rpm y un par máximo de 191 Nm a 4.500 rpm.
El equipamiento del Mazda 3 i-stop es similar al de cualquier Mazda 3.