Nissan 370 Z, mejorado en todos los aspectos

Madrid (España).- El nuevo 370Z lleva al mítico deportivo de Nissan hacia nuevos horizontes al proporcionarle más agilidad, más prestaciones y más diversión al volante. Más corto y ligero que su antecesor, estrena nuevas tecnologías como, por ejemplo, la primera caja de cambios manual con efecto doble embrague automático.

El exterior del coche es más agresivo que el de su predecesor. El nuevo diseño hace que el 370 Z sea 65 mm más corto que el 350Z, mide 4.250 mm de largo y se asienta sobre una distancia entre ejes de 2.550 mm, exactamente 100 mm menos que la de su antecesor. Con 1.315 mm, tiene la misma altura que el 350 Z mientras que ha crecido 30 mm en anchura hasta alcanzar 1.845 mm. Para asegurarse de que la línea del techo no perjudicará la habitabilidad interior, los asientos se han situado en una posición más baja, lo que ha contribuido a rebajar el centro de gravedad. La nueva batalla hace que este sea un coche mucho más ágil en carreteras reviradas, fruto de la menor distancia entre ejes.

Al crear su nueva imagen, los diseñadores de Nissan han incorporado a los elementos de estilo Z una nueva interpretación del dinamismo. Se han tomado prestados elementos de diseño del GT-R como la caída en ángulo del techo, que tiene su punto más elevado justo encima de los pilares A. Desde allí, baja directamente hasta el alerón del portón trasero en contraposición con el techo del 350Z que, desde el pilar A, se elevaba ligeramente en la zona del habitáculo antes de iniciar el descenso hacia la parte trasera.

El nuevo capo presenta un sistema de seguridad denominado pop-up, encargado de minimizar las consecuencias en caso de atropello.

Los pilotos traseros de tecnología LED tienen forma de boomerang y caracterizan la trasera del coche, mientras que los grandes faros delanteros, en forma de punta de flecha, siguen la curvatura del capó. Delante, una ancha «boca» para la toma de aire en la parte baja del frontal, añade agresividad a la imagen del coche.

La eficiencia aerodinámica ha mejorado con la inclusión de un ligero spoiler delantero y un alerón trasero integrado en el portón, que reduce la elevación y crea una fuerza de apoyo extra en el eje trasero.

Pero siguiendo una de las grandes ideas de Colin Chapman, más que el aumento de potencia, lo que más notaremos es su reducción de peso. 32 kg es lo que ha adelgazado el 370 Z. Esto se ha logrado gracias al uso de aluminio en el capó, las puertas y el portón trasero, en el 350Z el aluminio se utilizaba sólo para el capó, así como el uso masivo de materiales y componentes ligeros en la estructura de la carrocería y en la mecánica.

Es un deportivo por fuera y también lo es claramente por dentro. Como ejemplo valga la instrumentación que exhibe una de las características propias de todo coche deportivo: un cuentarrevoluciones situado en el centro y con la zona roja en las 7.500 rpm.

La disposición de todo el habitáculo gira en torno al conductor. Los asientos están situados muy bajos y se encuentran justo en el centro del coche para un óptimo reparto de pesos. Pese a que el coche es más compacto y tiene una menor distancia entre ejes, el espacio en el habitáculo no es menor que en el 350Z. Los dos asientos se encuentran separados por la consola, que tiene forma envolvente.

Tras el volante podemos observar el cuadro de mandos, en el que destaca la posición central del cuentarrevoluciones, a la derecha se encuentra el velocímetro y a la izquierda la pantalla del ordenador de a bordo. Los tres relojes se encuentran anclados a la columna de dirección, de manera que se mueven con ella cuando modificamos la regulación del volante. El resto de los controles se encuentran distribuidos de la forma más intuitiva posible, en la parte superior se encuentran los mandos del equipo de audio y del climatizador así como el botón de puesta en marcha y paro del motor. Los mandos del sistema de navegación opcional se encuentran dispuestos horizontalmente justo debajo de la pantalla para facilitar su uso. Tres diales redondos adicionales, uno de ellos ocupado ahora por un termómetro de aceite, se encuentran situados en la parte superior central de la consola. El toque final de esta disposición centrada en el conductor es el pedal del gas, anclado en el suelo. Tantos los pedales como el apoyapié izquierdo son de aluminio con pequeñas inserciones de goma para mejorar el agarre.

Por su parte, el asiento del acompañante es más amplio y pensado para el disfrute del viaje.

El maletero ha aumentado levemente de tamaño, y junto a un mayor espacio situado tras los asientos traseros, nos permite trasportar un mayor número de objetos.

El motor seleccionado, como indica el nombre del modelo, es un 3.7 litros que entrega una potencia de 336 CV. El corte de inyección ha sido estirado hasta las 7.000 rpm y gracias al aumento de cilindrada, el par alcanza los 366 Nm. El 35% de los materiales empleados en el propulsor son nuevos respecto al anterior. Y pese a que potencia y par han aumentado, el consumo ha descendido hasta los 10,5 l/100 km., en ciclo combinado, con unas emisiones de CO2 de 249 gr/km en la versión manual, lo que supone, en ambos casos, una mejora del 11%.

El motor puede ir acoplado a dos cajas de cambio diferentes. Una automática de siete velocidades con levas en el volante y una manual de seis relaciones, que será el primer cambio, no robotizado, con función de doble embrague automático incorporado. Este sistema permite igualar el eje primario y secundario de la caja de cambios para que se realice la transición entre relaciones de una forma especialmente suave y protegiendo el embrague.

Un chasis completamente revisado ha sido desarrollado para aprovechar todo el potencial de prestaciones del nuevo motor. La batalla se ha acortado 100 mm., 2.250 mm. en total, dotando al coche de una mayor agilidad en carreteras reviradas. Que unido a un reparto de pesos de 53/47 le dan al vehículo una gran direccionalidad. Las vías también se han modificado, ahora son 15 mm. más anchas delante y 55mm. detrás. La rigidez se ha incrementado en un 30%.

Estos cambios se combinan con una nueva suspensión delantera con estructura de doble trapecio y una revisada suspensión trasera multibrazo, ambas más ligeras y más robustas que antes y con una mayor estabilidad lateral. Esto proporciona una mejor caída de ruedas lo que facilita a la suspensión explotar mejor el agarre generado por los neumáticos.

El agarre queda confiado a unos neumáticos deportivos Yokohama Advan especialmente diseñados para el 370Z. Los delanteros son unos 225/50 R18 mientras que los traseros son unos más anchos 245/45 R18. En opción, el coche puede equiparse con unas llantas RAY de aleación de aluminio forjado calzadas con neumáticos Bridgestone Potenza 245/40 R 19 delante y 275/35 R19 detrás.

El coche lleva de serie un diferencial viscoso de deslizamiento limitado y el Vehicle Dynamic Control (VDC) que integra los controles electrónicos de tracción y estabilidad que reducen el par del motor y frenan las ruedas individualmente cuando es necesario. Para usar el coche en circuito, el VDC puede desconectarse mediante un botón en el salpicadero. La dirección asistida es capaz de modificar su dureza según la velocidad a la que nos estemos desplazando.

Para poder detener el vehículo, Nissan lo ha equipado con discos ventilados de 355 mm de diámetro en el caso de los delanteros y de 350 mm los traseros. Los sistemas de seguridad que actúan sobre los frenos son el ABS, control de tracción y sistema de ayuda en frenada.

El equipamiento es muy completo de serie. Incluye botón de puesta en marcha del coche, llantas de aleación ligera y frenos deportivos, esto en lo que afecta a las prestaciones. Para hacernos la vida más cómoda a bordo, encontramos asientos de cuero, equipo de sonido Bose, Synchro Rev Control, indicador de la marcha seleccionada y control de velocidad de crucero.