©Bugatti
Después de su primera aparición internacional en el pasado concurso de elegancia de Pebble Beach, el
Bugatti Veyron 16.4 Grand Sport ha iniciado su producción limitada a unos 150 exclusivos ejemplares.
©Bugatti
La versión descapotable del Bugatti Veyron ha recibido modificaciones sustanciales, muy enfocadas a las demandas de una clientela acostumbrada a la exigencia de una producción hecha casi a medida. La colocación de
una capota escamoteable ha obligado a rediseñar la estructura monocasco del vehículo por completo para mantener la rigidez estructural del conjunto y la capacidad de protección contra impactos.
©Bugatti
Como resultado del proceso, se ha modificado
el túnel de transmisión, el pilar B, y la plataforma central de fibra de carbono ha sido reposicionada para asegurar el mínimo impacto en cuanto a flexibilidad torsional. Las puertas del han sido fabricadas en fibra de carbono. En el interior, la versión descapotable del Bugatti Veyron incluye novedades como un
monitor integrado en el retrovisor central o un nuevo equipo de sonido.
Con la capota cerrada, el Bugatti Veyron 16.4 Grand Sport puede alcanzar los 407 km/h, mientras que descapotado su velocidad máxima se limita a los 360 km/h. Una pequeña capota adicional de tela protege a los ocupantes en caso de lluvia, aunque el vehículo sólo podrá circular con ella a 160 km/h.
©Bugatti |
©Bugatti |
©Bugatti |
Según Bugatti, el nuevo Grand Sport no es sólo una versión decapotable del Veyron. Ahora transmite más al conductor, es más preciso y ha corregido parte de sus problemas de subviraje.
Las primeras unidades del vehículo serán entregadas durante este mes previo pago de los los 1.4 millones de € de su precio, excluyendo tasas y transporte. Por ahora unas 30 de las futuras 150 unidades del Veyron 16.4 Grand Sport ya tienen propietario.