El primer diseño de Morgan fue el famoso Threewheeler Morgan Runabout, una propuesta de puro ocio concebida para bolsillos con pocos posibles y muchas ganas de divertirse. El enorme éxito del Threewheeler en los años 20 elevó la producción de Morgan hasta las 2.500 o 3.000 unidades anuales, que no es poco, con una pequeña producción realizada en Francia bajo licencia.
Por aquel entonces toda la producción de Morgan estaba más que vendida antes de fabricarse, gracias al éxito del concepto de coche pequeño, tremendamente divertido y fiable. La venta de modelos de tres ruedas comenzó a declinar hacia 1935, coincidiendo con la llegada de vehículos de producción masiva de Ford, Morris o Austin, mucho más modernos y adaptados a los nuevos tiempos. Morgan respondió a la nueva situación en 1936 con el 4/4, un deportivo ligero -por fin de cuatro ruedas- con un motor de cuatro cilindros Coventry Climax. El valor del 4/4 era su ingeniería simple y efectiva, al servicio de un vehículo concebido básicamente para la diversión.Hoy en día, el Morgan 4/4 lleva el concepto de pureza automovilística a otro nivel. Supone una auténtica vuelta a las bases, a la elegancia de la simplicidad. Con un nuevo motor de 1.6 litros y 115 CV y unos escasos 800 kg de peso, el 4/4 Sport combina diversión en abundancia con economía de uso, siempre y cuando no se quiera optar por una versión algo más poderosa, el Morgan Plus 4, con motor Ford de cuatro cilindros y 2.0 litros Duratec que entrega 145 CV.
Su hermano casi gemelo, el 4 Seater, se ha mantenido en producción durante 70 años, otro récord difícil de superar. Hoy en día está disponible con el mismo motor de 2.0 litros Duratec o en versión V6 Roadster con 3.0 litros y 204 CV de potencia. Con sus ínfimos 938 kg de peso, esta versión es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 5 segundos.
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100 años de Morgan (II): Morgan Aero 8 |