La construcción ligera y la distribución de los componentes han de asegurar las cualidades dinámicas del vehículo. El motor eléctrico está integrado completamente en el eje trasero, mientras que las baterías se han alojado en el túnel de transmisión y el espacio ocupado habitualmente por el depósito de combustible.
Los más que respetables 1.800 kg del vehículo mantienen un reparto de pesos en los ejes típico de BMW, además de un centro de gravedad bajo, requisitos indispensables para conseguir una buena dinámica. La distribución de los componentes del motor también ha permitido disponer de cuatro asientos completos y un volumen del maletero de unos 200 litros.Las prestaciones previstas arrojan una aceleración de 0 a 100 km/h en menos de 9 segundos y una velocidad máxima de 145 km/h, limitada electrónicamente. La autonomía simulada es de 160 kilómetros en el uso cotidiano con todos los sistemas secundarios activados.
El conector de carga que monta el BMW ActiveE procede del Mini E, y permite acoplar el acumulador de iones de litio en un enchufe convencional, una estación pública de carga o bien un wall box. Para completar la carga en un enchufe de corriente de alta intensidad se necesitan unas 3 horas.El BMW Concept ActiveE también incluye algunos detalles interiores desarrollados específicamente para su aplicación en futuros vehículos eléctricos. Entre ellos se encuentran funciones de mando a distancia a través del teléfono móvil que permiten averiguar el estado de carga del acumulador, buscar estaciones de carga públicas y activar la función de calefacción auxiliar o el sistema de climatización.