En el caso del Galaxy, su propuesta continuará siendo la más familiar de los dos monovolúmenes, con siete plazas hábiles y un amplio volumen de carga, que parte de unos aparentemente modestos 308 litros con todos los asientos ocupados, hasta los 2.325 litros si se pliegan la segunda y tercera filas y se aprovecha la capacidad disponible hasta el techo.
Ford, sin embargo, pone a disposición de sus clientes con exigencias más específicas dos variantes alternativas, el Trend 2.0 TDCi 115, el único con cambio manual y con el que cubriría la parte baja de su oferta, y el Titanium 2.0 EcoBoost 203 powerShift.
El acabado Trend incorporará de serie elementos tales como el climatizador bizona, radio-CD, elevalunas eléctricos delante y detrás, faros antiniebla, ordenador de a bordo y volante y pomo del cambio forrados en piel, entre otros. El Titanium añade a estos accesorios las llantas de aleación de 17″, luces diurnas tipo LED, retrovisores exteriores plegables eléctricamente, regulador/limitador de velocidad o el parabrisas termorreflectante.
El Ford S-Max, por su parte, mantiene su talante más dinámico respecto a su hermano mayor sin sacrificar en exceso la capacidad interior, aunque en este caso las dos plazas suplementarias son opcionales. Sin ellas el volumen del maletero varía entre los 854 y los 2.100 litros, mientras que con 7 plazas se dispone desde 285 hasta 2.000 litros.El S-Max comparte con el Galaxy prácticamente la misma oferta de motores y transmisiones, pero añade a su catálogo un acabado con nivel de equipamiento superior, el Titanium S, disponible en exclusiva para el 2.0 TDCi 163 y para el 2.0 EcoBoost 203. La «S» aporta al monovolumen deportivo de Ford llantas de aleación de 18″, el paquete aerodinámico, la suspensión deportiva y la tapicería parcialmente en piel.
Las opciones, tanto para el Galaxy como para el S-Max, estarán agrupadas en paquetes disponibles para cada versión, de manera que el paquete Trend interior incluirá el control de velocidad y el sensor de luz y de lluvia por 650 €. El Trend exterior, por su parte, contiene los sensores de aparcamiento delanteros y traseros, los retrovisores plegables y llantas de aleación de 16″.El paquete Sensores estará disponible tanto para el Titanium como para el Titanium S, y contará con el sistema de ayuda al aparcamiento delantero y trasero, el sensor de presión de los neumáticos y el freno de mano eléctrico, a cambio de 650 €. Los faros de xenón HID, los pedales de aluminio y la tapicería Alcantara forman parte del paquete Titanium S, que costará 850 €.
Ford S-Max | P.V.P. (orientativo) |
Titanium S 2.0 EcoBoost powerShift 203 | 35.100 € |
Trend 2.0 TDCi 115 | N.D. |
Trend 2.0 TDCi 140 powerShift | 29.500 € |
Titanium 2.0 TDCi 140 powerShift | 31.500 € |
Trend 2.0 TDCi 163 powerShift | 30.700 € |
Titanium 2.0 TDCi 163 powerShift | 32.700 € |
Titanium S 2.0 TDCi 163 powerShift | 35.700 € |
Ford Galaxy |
|
Titanium 2.0 EcoBoost powerShift 203 | 35.350 € |
Trend 2.0 TDCi 115 | 33.150 € |
Trend 2.0 TDCi 140 powerShift | 34.350 € |
Titanium 2.0 TDCi 140 powerShift | 36.350 € |
Trend 2.0 TDCi 163 powerShift | 35.550 € |
Titanium 2.0 TDCi 163 powerShift | 37.550 € |