Como no podía ser de otra manera, llevando tal apellido, el Punto Evo ha sido vitaminado con un motor que, en esta ocasión, ofrece 165 CV, frente a los 155 CV con que contaba el Abarth Grande Punto, su predecesor.
La magia de los técnicos de Abarth ha contado con la inestimable ayuda de la tecnología Multiair de gestión de la admisión mediante el control variable de las válvulas. Gracias a ello, el pequeño 1.4 con un turbo Garrett puede presumir de ofrecer unas sensaciones especialmente deportivas y mejora, no sólo las cifras de potencia (10%) y par (15%) del propulsor 1.4 T-Jet al que sucede, sino también las de consumos y emisiones de CO2, que reduce en ambos casos en un 10%. A lograr este resultado ayuda el sistema Start&Stop, instalado por vez primera en un deportivo de su segmento.Por si esto supiera a poco, el TTC (Torque Transfer Control) se encarga de asegurar una eficacia en curva superior, gracias a su función emuladora de un diferencial autoblocante en el eje delantero, al frenar la rueda que pierde tracción, con lo que se transfiere el par motor a la otra.
Naturalmente, tanto la suspensión delantera McPherson como la trasera con ejes semiindependientes con eje de torsión cuentan con elementos elásticos ajustados a las nuevas exigencias, como son unas barras estabilizadoras más gruesas y unos muelles delanteros un 20% más rígidos.Ahora bien, el sello Abarth no podía dedicarse simplemente a desarrollar versiones más potentes de la gama Fiat. Por ese motivo, si se hurga un poquito dentro de su catálogo, nos encontramos con el kit «esseesse», un conjunto de accesorios que, para empezar, elevan la potencia máxima del propulsor Multiair 1.4 16v Turbo hasta los 180 CV. Discos ventilados y perforados, pastillas delanteras de altas prestaciones, muelles específicos y que rebajan la altura del chasis, así como llantas de 18″ de diseño Abarth «esseesse».