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Cuando el 9 de mayo de 1950 se constituyó la Sociedad Española de Automóviles de Turismo, SEAT, las ambiciones del Gobierno de la época pasaban por crear una empresa con la que generar riqueza, puestos de empleo en un país necesitado de estímulos económicos en la época de la posguerra.
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A través del INI (Instituto Nacional de Industria), se firmó un acuerdo con inversores privados y con Fiat. Mientras el primero controlaba la gestión con el 51% del capital, los segundos aportaban el dinero restante (42%) y el constructor italiano, por su parte, valoraba su asesoramiento técnico y la licencia de producción de sus modelos en el 7% restante.
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Tres años y medio después, el 13 de noviembre de 1953, salía de la nueva factoría de la Zona Franca el primer modelo de SEAT, el 1400 A. Se trataba de un sedán equivalente a lo que hoy sería el segmento de las berlinas medio-altas como el Exeo. Su motor tetracilíndrico enviaba 44 CV a las ruedas traseras y, gracias a las generosas dimensiones de su plataforma, dio lugar posteriormente a variantes como vehículo de ambulancia o comercial.
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Inicialmente, el ritmo de producción era de 5 unidades al día, aunque pronto se fue incrementando para aprovechar la capacidad de unas instalaciones que ocupaban 200.000 metros cuadrados, 75.000 de los cuales estaban dedicados a montaje.
Con ello, en 1957 se fabricaban 10.000 unidades al año (algo más de 27 al día) y de los 925 empleados con los que se inició la actividad ya se había llegado a los 5.000.
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Otro de los logros de la empresa fue el fomentar el crecimiento de la industria auxiliar, gracias a lo cual se pudo nacionalizar la adquisición de todos los componentes del 1400.
El siguiente paso relevante para SEAT llegó precisamente ese mismo año, cuando se lanzó el 600, el coche que motorizó el país y mejoró la calidad de vida de nuestros abuelos, que a partir de entonces tuvieron acceso a una movilidad desconocida hasta la fecha.
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La gran demanda generada sobre el SEAT 600 obligó a la marca a suspender los pedidos, pero ello no fue obstáculo para que en los años sucesivos los beneficios se incrementaran gracias al éxito de un coche que retiró de la carretera el enjambre de motocarros, microcoches y motos (con o sin sidecar) que poblaban el asfalto peninsular.
60 años de SEAT
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