Fue en abril, pero quizá no se lo creían del todo y por eso no lo han dicho hasta hoy. El próximo Subaru Impreza WRX STI, que contará con las especificaciones 2011, ha sido declarado el más rápido de la historia.
El juez encargado de dictar sentencia, como no podía ser de otra manera, ha sido el Nordschleife de Nürburgring. El piloto responsable de demostrar la veracidad de los hechos, un granjero llamado Tommi Mäkinen. Las pruebas irrefutables, proporcionadas por la cámara onboard y un cronómetro. El resto, es una historia que cada vez dura menos, concretamente 7 minutos y 55 segundos clavados, un mundo de 4 segundos menos que la versión actual.
Subido en la carrocería sedán de 4 puertas, que por cierto todos nos alegramos de que vuelvan a comercializar, el tetracampeón finlandés demuestra tener todavía muy buenos reflejos y algo que no sabría si llamar sangre fría o simple locura. Posiblemente, una mezcla de las dos, la misma que le permitió ganar hasta en cuatro ocasiones en ese rally que acostumbra a pasar por el Col de Turini. Por cierto, la última vez que ganó allí, en 2002, lo hizo con un Subaru Impreza.