Todavía ocupada con el lanzamiento europeo del Q50, la marca de lujo propiedad de Nissan ha adelantado en el Salón de Frankfurt una versión bastante cercana a la producción –aunque sin dejar de ser un concept car- de su futuro hermano pequeño, el Q30.
En la creciente gama del fabricante nipón, el Infiniti Q50 está destinado a convertirse en el sucesor de la familia G37, que sabiamente han pasado a denominarse simplemente Coupé y Cabrio. El Q30 es otra cosa muy diferente: se trata del intento de Infiniti por hacerse con un hueco en el segmento de los compactos, al que las marcas premium europeas cada vez están prestando más atención y para el que todavía se prevé un crecimiento importante a nivel mundial.
El Q30 se ha presentado en Frankfurt con unas formas futuristas que Johan de Nysschen, Presidente de Infiniti Motor Company, ha relacionado con el intento de la compañía por hacerse con los favores de un público más joven. Alfonso Albaisa, Director Ejecutivo de Diseño, ha descrito el Infiniti Q30 como una mezcla de coupé, berlina y crossover destinado a usuarios que quieren romper con las convenciones y buscar nuevas experiencias.
La producción del Infiniti Q30 no empezaría hasta 2015 en la planta inglesa de Sunderland. Quién sabe si por aquel entonces Sebastian Vettel seguirá siendo el rival a batir en la Fórmula 1. Si es así, los responsables de Infiniti continuarán presumiendo como han hecho en Frankfurt del papel del piloto alemán en el desarrollo del modelo.