Prueba realizada por Gaby Esono
El Ford EcoSport 2016 es la renovación de la aproximación de la marca del óvalo a los coches de moda, el de los englobados en el segmento B de los crossovers pequeños. La cuestión del tamaño es relativa, porque por longitud estos modelos acostumbran a superar los 4 metros.
En el caso del Ford EcoSport, nos encontramos con una carrocería de 4.017 mm, gracias a que ahora está disponible sin la rueda de repuesto colgada tras el portón trasero (con ella se alarga hasta los 4.273), que lo hacía estéticamente más campero pero menos práctico en ciudad.
Estamos, pues, con un coche con más aspecto de todoterreno que algunos de sus principales rivales, como el Peugeot 2008, el Renault Captur, el Nissan Juke, el Opel Mokka o el Mazda CX-3, con los que comparte sin embargo el mismo objetivo de poner en apuros a los conductores indecisos: ¿me compro un compacto tradicional y que me da lo que necesito, o me lanzo a por un coche que mola por un precio parecido?
Las marcas, fieles seguidoras de las tendencias que marca el mercado, están apostando por este tipo de vehículos que podrán tener tracción a las cuatro ruedas -o no, como es este caso-, contar con una carrocería claramente elevada para afrontar caminos -el EcoSport es de los que más confianza ofrecen en este sentido-, pero sí aportan sin ninguna duda un aspecto distintivo que hace que merezcan la pena para muchos conductores.
Ford está sacando un gran partido al concepto EcoBoost en el desarrollo de sus motores de gasolina. No por nada el pequeño 1.0 EcoBoost lleva varios años imponiéndose en los Premios Motor del Año en su cilindrada. El Ford EcoSport monta la versión de 125 CV de este más que voluntarioso propulsor tricilíndrico sobrealimentado, asociado obligatoriamente a una caja de cambios de 5 velocidades, y es de momento el tope de la gama hasta que se introduzca la variante de 140 CV a partir de marzo de 2016.
Montado en el pequeño crossover de Ford, los 125 CV de potencia y 170 Nm de par se muestran suficientes para mover los 1.317 kg declarados para esta versión a un ritmo de crucero bien por encima de la media del tráfico, siempre y cuando la orografía no sea demasiado accidentada. En cuanto llegan los repechos, especialmente si vamos cargados, se hace necesario recurrir con frecuencia a las reducciones si queremos mantener cierta soltura en el viaje. A falta de una prueba en profundidad, la impresión que dio es que el excelente registro de consumo medio homologado, 5,4 l/100 km, puede ser muy difícil de conseguir en condiciones de tráfico realess.
Por debajo, el 1.5 Ti-VCT atmosférico de aluminio de 112 CV será la versión de acceso, disponible sin embargo tanto con cambio manual de 5 marchas como con el eficaz Powershift automático de 6 relaciones, con el que consigue declarar el mismo consumo que con el manual, 6,3 l/100 km.
La opción diésel la protagoniza en exclusiva el motor 1.5 TDCi 95 CV con cambio manual de 5 marchas, variante sin aspiraciones prestacionales pero sí de ahorro de combustible, 4,4 l/100 km.
El Ford EcoSport 2016 ha recibido modificaciones en su mayoría sutiles -la más evidente es la supresión de la rueda de repuesto colgada del portón trasero; ahora es opcional-, realizadas en respuesta a los comentarios del público europeo.
Detalles como las inserciones de color negro grafito en el panel de instrumentos, consola central y paneles de puertas, o asientos parcialmente en cuero en el acabado Titanium (más lujoso que el Trend, de acceso), dan una presencia renovada y de mayor sensación de calidad percibida, que se ha visto reforzada asimismo con la aplicación de nuevos materiales para mejorar el aislamiento acústico y de vibraciones. En el debe, se mantiene la pantalla multifunción de 4 pulgadas de serie en el centro del salpicadero, demasiado pequeña para estar tan alejada, detalle que no acaba de quedar del todo resuelto con el navegador opcional, que incluye un display de 5 pulgadas.
Se han revisado -es decir, endurecido- los tarados de suspensión, que ahora cuentan con muelles, amortiguadores y el eje torsional trasero más rígido, lo que ha mejorado sensiblemente su comportamiento en carretera, y también se han reconfigurado el control de estabilidad y la asistencia de la dirección.
Con la llegada del nuevo Ford EcoSport 2016, se abre también el abanico de niveles de acabado con las versiones Titanium S, que además del cuero parcial, sistema de apertura y arranque sin llave Ford Power, climatizador automático y raíles de techo del Titanium, añade al equipamiento de serie llantas de aleación de 17 pulgadas, techo bitono y espejos retrovisores en negro, cristales de privacidad, suspensión deportiva y sistema de sonido Sony SYNC.