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Rolle (Suiza).- La cuarta generación del Nissan Micra representa un capítulo totalmente nuevo en la historia de este longevo modelo urbano, y ha sido concebida para convertirse en una
nueva referencia en las ciudades europeas gracias a su oferta sencilla y eficiencia en el consumo.
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La nueva plataforma V es uno de los elementos clave de la construcción del nuevo Micra. A pesar de ser mayor que la del Micra anterior, la plataforma V ha sido
diseñada para ser lo más rígida y ligera posible, con el objetivo de mejorar el rendimiento y rebajar significativamente el consumo y las emisiones.
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El Micra es también el primero modelo de Nissan en montar la
nueva gama de motores de gasolina 1.2 de tres cilindros y bajas emisiones. La variante de acceso es un atmosférico de
80 CV y unas emisiones de CO2 de 115 gr/km. En la versión más potente del bloque, la
inyección directa y un compresor aumentan la potencia hasta los 98 CV, mientras que las emisiones caen hasta los 95 gr/km. Esta versión se lanzará en Europa durante la primavera de 2011.
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Nissan considera que
la eficiencia de los dos propulsores no hace necesario contar con una oferta diésel. Lo que sí estará disponible es una
transmisión de variación continua CVT que, junto a la transmisión manual de 5 velocidades, se podrá acoplar a los dos propulsores disponibles.
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La simplicidad también ha guiado la oferta de carrocerías y acabados para el urbano de Nissan. Contará
únicamente con 5 puertas y los tres niveles de acabado tradicionales en Nissan. Todas las versiones contarán
de serie con aire acondicionado y control de estabilidad ESP. En las versiones Tekna se ofrecerá el nuevo sistema medidor de huecos de aparcamiento PSM.
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La cuarta generación del Micra es la
primera verdaderamente global del modelo. Se fabricará por primera vez en factorías de China, Tailandia, la India y México y se comercializará en 160 países, muchos de ellos mercados emergentes en los que la marca japonesa no tenía presencia.
Según Nissan, la filosofía de fabricación flexible aplicada a la producción del Micra ha de permitir reducir el estrés en la conducción urbana, algo que la firma japonesa ya nos enseñó que era capaz de hacer con el Cube. Esta flexibilidad ha permitido a los ingenieros desarrollar una versión del Micra adaptada a las necesidades de cada una de las regiones donde se comercializará.