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Redacción – Ford ha aprovechado el desarrollo de la segunda generación del C-Max para mejorar sustancialmente su monovolumen compacto en varios puntos: primero la presencia exterior, con unas formas con más personalidad que las de su anodino predecesor. Segundo la presencia interior, con unos acabados de mejor nivel y un diseño más colorista y atractivo. Y tercero la versatilidad, una asignatura en la que deberán seguir trabajando.
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El elaborado bastidor, sin embargo, vuelve a ser uno de los protagonistas principales en el familiar de Ford. No te vamos a engañar diciendo que se comporta como un deportivo, pero de lo que sí puedes estar seguro es de que el Ford Focus C-Max es más divertido que alguno de los coupés que hemos probado últimamente.
Todo ello se combina con un motor 2.0 TDCi asociado a la nueva caja de cambios secuencial de doble embrague de Ford, la Powershift de 6 velocidades, y de cuyo funcionamiento sólo te podemos avanzar una cosa: es magnífico.
Todo esto y alguna cosa más, muy pronto en Cochesafondo.com.