R. Escriche – El DTM ha entrado en una fase definitiva de su expansión como campeonato. Tras acomodar en las nuevas regulaciones los SuperGT japoneses y las GrandAm norteamericanas, 2011 comienza como una verdadera temporada de transición para abrir después un escenario mucho más estimulante que se iniciará con la esperada entrada en el DTM del tercer gran fabricante alemán, BMW.
En 2012 entrará en vigor una nueva reglamen- tación de la que, en realidad, todavía sabemos muy poco. ¿Cómo estáis viviendo los pilotos todos estos cambios?
Queda todavía un poco lejos. Hay un año de transición de por medio. Sabemos que el coche va a cambiar estructuralmente. Para empezar será un coupé, y tendrá que ser completamente nuevo porque la reglamentación cambia.
Se supone que el elegido en Audi será el A5.
Se supone, pero no lo sé exactamente. BMW sí ha dicho que entrará con el M3, pero Mercedes-Benz no lo ha dicho, ni Audi tampoco.
En este contexto resulta curioso que Mercedes-Benz acabe de presentar el nuevo Clase C Coupé en el Salón de Ginebra…
La lógica la conocemos, pero todavía nadie lo ha hecho público y yo no he visto el coche.
Lo que sí es ya una realidad anunciada a los cuatro vientos es la entrada del último gran fabricante alemán que le faltaba al DTM. ¿Qué crees que puede aportar el regreso de BMW?
La entrada de BMW será positiva. Hará el campeonato mucho más grande y más competitivo. Yo espero que el DTM crezca mucho más, y especialmente en España, donde la gente empieza a saber de qué estamos hablando. Si tenemos la suerte de que nos apoyen las televisiones, como parece que va a ser, la gente se va a enganchar porque es un campeonato muy bonito y en Alemania es casi más importante que la Fórmula 1.
Trabajando para una marca como Audi, imaginamos que es imposible no pensar alguna vez en otros objetivos a largo plazo, aparte de ganar el DTM.
Este es un objetivo que intentaré conseguir tarde o temprano, pero lo que importa es que estoy muy contento en Audi y espero seguir muchos años con ellos. Me han dado la oportunidad de ser un piloto profesional, de trabajar para una marca muy grande a nivel mundial. Me ha cambiado la vida por completo. Pasé de luchar para subirme a un coche al año siguiente a tener un trabajo en una marca tan grande como Audi. Hoy en día trabajar en algo que te gusta es muy difícil, y a mí me está pasando.
Y además, en Audi tienen otros programas deportivos verdaderamente apetecibles para cualquier piloto…
No hace falta ni hablar de lo que significan las 24 Horas de Le Mans para Audi, y nunca se sabe cuantas vueltas dará la vida, pero a lo mejor hoy están aquí y mañana en otra parte.
Apostaríamos lo que sea a que te encantaría entrar en el programa de Le Mans.
Soy demasiado joven para este tipo de proyecto, y en Audi lo tienen clarísimo. La filosofía es formar a los pilotos, crear una familia, y no quieren compaginar proyectos. Pero claro que me gustaría, porque es una carrera muy bonita y el proyecto más grande de la marca.
Este año hemos visto como el actual campeón del DTM no dudaba ni un segundo en irse a una escudería de segunda fila de la Fórmula 1. A pesar de que el DTM es un campeonato de primera línea, la mayoría de pilotos siguen teniendo como última meta entrar en la Fórmula 1.
Yo entre ellos, hasta hace muy poco. Pero hoy en día o llevas 15 o 20 millones de euros a la Fórmula 1 o es imposible entrar. La Fórmula 1 se está volviendo un poco una categoría no profesional, porque en ella hay pilotos que compiten porque traen dinero. Aunque yo creo que todo esto cambiará y todo volverá a ser como antes cuando se arregle un poco el tema de la crisis. Si yo tuviera un equipo de Fórmula 1 haría lo mismo. No por eso hay que despreciar la Fórmula 1, pero es la realidad.
Antes que la Fórmula 1 o las 24 Horas de Le Mans, lo seguro es que está a punto de comenzar una nueva temporada del DTM. ¿Qué metas te has marcado en tu segundo año en el campeonato?
Básicamente mejorar mi actuación de 2010 y otras que tengo en la cabeza, pero me las guardo para mí.
Seguro que entre ellas está conseguir algún podio…
Es lo lógico, porque el año pasado estuvimos muy cerca. Con este paso en experiencia, para empezar lucharemos para acabar todas las carreras en los puntos, que sí es uno de mis objetivos principales.