Dakar 2014 – Etapa 2: Stéphane Peterhansel pone orden

Gaby Esono.- Si los buggies tenían alguna esperanza de luchar por la victoria en este Dakar 2014 era, sin duda, por sus aptitudes sobre las dunas. Y la etapa de hoy era su primera reválida. En contraste con la reviradísima especial de la primera jornada, el itinerario de la segunda etapa, disputada entre San Luis y San Rafael, extendía la arena por la rápida especial de 301 km, de un total de 596 km.

Nani Roma/Michel Périn – X-Raid Mini Countryman All4 Racing ©X-Raid

El equipo X-Raid ha demostrado haber hecho bien el trabajo en la evolución del Mini Countryman All4 Racing, que con Stéphane Peterhansel y Jean-Paul Cottret se ha mostrado intratable en un terreno que, en principio, debería haber favorecido a monturas como el Red Bull Buggy SMG de Carlos Sainz y Timo Gottschalk. De hecho, el piloto español ha sido el único capaz de aguantar el ritmo del once veces ganador del Dakar, que tras el pinchazo de ayer hoy se ha situado al frente de la clasificación, con Sainz segundo.

Peterhansel se mostraba lógicamente muy satisfecho por el resultado conseguido, sobre todo teniendo en cuenta lo variado del trazado, “con pistas rapidísimas y en general de mucha altitud”, aseguraba a la llegada. “Hemos tenido que cruzar varios cauces secos con muchas piedras, así que el riesgo de pinchar era altísimo.

Carlos Sainz/Timo Gottschalk – Red Bull Buggy SMG ©Red Bull

El tramo final nos ha regalado unas bonitas dunas y gran afluencia de público, lo cual nos ha facilitado la navegación; bastaba con ver el público en las crestas para ver por dónde había que pasar. Por último, ha habido unas rectas al más puro estilo enduro, tipo Le Touquet, con un terreno muy irregular. Ha sido, en definitiva, una especial de lo más completa, globalmente muy rápida…”. En términos parecidos se expresaba Carlos Sainz, quien afirmaba haber bajado el ritmo en las zonas pedregosas para reducir el riesgo de pinchazo.

Stéphane Peterhansel/Jean-Paul Cottret – X-Raid Mini Countryman All4 Racing ©X-Raid

Nani Roma y Michel Périn, por su parte, volvían a lamentar haber tenido que tragar polvo. En la primera etapa, el de Folgueroles se las tuvo con Carlos Sainz, que no le dejó pasar a pesar haberlo alcanzado en plena especial y haber estado tratando de adelantarle –Sainz asegura que el sentinel que avisa de la proximidad de un vehículo más rápido no le sonó ni una vez-. En esta segunda Nani el problema con sus compañeros del equipo X-Raid.

Primero Nasser Al-Attiyah y Lucas Cruz, a los que un pinchazo les retrasó lo suficiente para impedir la visibilidad del Mini All4 Racing amarillo. Un segundo pinchazo les permitió adelantarlos pero entonces era la estela del Mini de Orlando Terranova y Paulo Fiuza la que le impedía ir a cuchillo. Algún error de navegación, que casi le cuesta chocar de frente con Al-Attiyah y Cruz, más un pinchazo e, incluso, la subida de la temperatura del aceite del motor cuando afrontaba las dunas, le llevaba a decidir tomarse el resto de la etapa con más calma.

Sin opciones se ha quedado los primeros líderes de la prueba, Carlos Sousa y Paulo Fiuza, que rompieron el turbo de su Great Wall Haval. La octava posición de sus compañeros de equipo, Christian Lavieille y Jean-Pierre Garcin, muestra sin embargo que el coche es capaz de estar cerca del grupo de cabeza.