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Gran experiencia la vivida ayer sábado en el EcoRallyRACC, una competición en la que se pone a prueba la capacidad de los equipos para realizar el recorrido marcado con el menor consumo en la media de velocidad señalada por la organización.
Nada menos que 55 coches se habían inscrito en la segunda edición de esta prueba (denominada Eco Tour RACC en 2011), el doble respecto al año pasado, y que en Cochesafondo disputamos pilotando, junto con Josep Camós de Motorpasión que hizo de copiloto, uno de los cinco Ford Fiesta 1.0 EcoBoost de 125 CV azules inscritos por Ford España (más un Ford Focus RSC con el mismo motor) con el objetivo de hacer un buen papel en la categoría Eco2, una de las más competidas, reservada a coches con motor de gasolina de menos de 1.6 litros y emisiones de CO2 inferiores a 120 g/km.
A primera hora de la soleada mañana, éramos de los primeros en llegar al Paseo de Sant Joan de Barcelona, esperando el momento de unas verificaciones en las que podían verse todo tipo de coches eficientes, empezando por los eléctricos (Citroën C-Zero, Nissan Leaf, Renault Kangoo o el primer vehículo sin emisiones matriculado en Andorra, un Peugeot iOn). Entre los híbridos de la clase Eco1, los HSD de Toyota (Auris, Yaris y por supuesto Prius, uno de los cuales funcionaba además con GLP) volvían a ser la referencia en una categoría en la que participaban varios Peugeot Hybrid4una categoría en la que participaban varios Peugeot Hybrid4 (entre ellos un 508 RXH a manos de Antonio Zanini y Àlex Romaní), dos BMW y el nuevo Lexus IS 300h.
La jornada estaba divida en dos etapas con cuatro tramos cronometrados cada una, que se dieron a conocer una hora antes de que se diera la salida, puntual a las 11:00 pasando bajo el Arc del Triomf en dirección al Circuit de Catalunya. La ruta, sin embargo, distaba mucho de buscar la línea recta, ya que el RACC trazó un recorrido de 72,03 kilómetros que alternaba transitadas carreteras comarcales con abundante recorrido urbano, empezando por la propia Ciudad Condal, que había que atravesar casi por completo para llegar al tramo de regularidad, que nos llevaba desde la popular carretera de L’Arrabassada hacia Sant Cugat y Cerdanyola, luego Montcada y Santa Coloma de Gramenet para llegar al circuito atravesando antes Sant Foix de Campcentelles.
Se trataba del primer sábado de la Operación Salida de este verano, lo que explicaba la abundancia de tráfico durante la mañana. Ello condicionó en gran medida la circulación en ciudad, plagada de arranques y paradas, y posteriormente la conducción en recorrido interurbano, en el que resultaba difícil mantener un ritmo sostenido debido a la gran cantidad de vehículos y ciclistas en la carretera. Al llegar al padock del circuito, lo vivido durante el trayecto se confirmó en la tabla de clasificación de regularidad, en la que figurábamos en 31ª posición y sin opciones para el triunfo final.
La táctica para la segunda etapa fue tratar de reducir al máximo el consumo y prestar mucha más atención a los controles de paso, aprovechando que el tráfico previsiblemente estaría más despejado en los 99,70 km de que constaba. A las 15:30 se iniciaba la vuelta a Barcelona, en esta ocasión en dirección a Bigues i Riells, donde nos esperaba el primer tramo cronometrado de la tarde, en el que nos encontrábamos con una carretera muy revirada pero en la que marchábamos prácticamente solos. Eso nos hizo más fácil a todos realizar buenos tiempos, pero lo aprendido por la mañana nos permitió mejorar sustancialmente nuestra regularidad, que nos dejó finalmente en el puesto 23 absoluto después de contabilizar el consumo (quedamos en 17ª posición). Los 7,63 litros que los comisarios lograron introducir en el depósito al finalizar el último tramo (lejos de los extremadamente sorprendentes 2,59 l/100 km logrados por el SEAT Mii de Eugeni Gallego) daban como resultado una media 4,44 l/100 km (apenas 0,14 l/100 km por encima del consumo homologado) y, a pesar de que el registro que marcaba el ordenador de a bordo del Ford Fiesta se había quedado al final de la competición en 5,6 l/100 km, se trata de unos valores excelentes, sobre todo teniendo en cuenta las difíciles condiciones en las que discurrió la prueba y a pesar de las indicaciones del copi, que trató en vano de hacerme entender algunas de las técnicas de conducción eficiente que le habían enseñado en Alemania hace año y medio. Lo dicho, un debut prometedor para la próxima edición.