©Aston Martin
Gaydon (Reino Unido).- En el lejano 2003, el DB9 se convirtió en
el primer modelo fabricado por la nueva Aston Martin en Gaydon y marcó el inicio del renacimiento de la histórica firma británica en el siglo XXI.
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Siete años después de su debut, Aston Martin ha
lavado la cara al DB9 con pequeñas modifi- caciones estéticas y la incorporación de serie del sistema de amortiguación adaptativa, además de otras novedades en equipamiento opcional.
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Los cambios estéticos han sido bastante sutiles, aunque afectan a casi
todo el frontal del vehículo, las luces traseras y las nuevas llantas de 20 pulgadas. Las principales novedades se encuentran unos centímetros hacia adentro, con la
incorporación de la nueva amortiguación adaptativa ADS que se ofrece de serie en las versiones coupé y convertible.
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El Adaptive Damping System ADS evalúa de forma constante la dureza óptima del amortiguador de forma similar al sistema empleado el DBS y el Rapide. Mediante un botón situado en la consola central, el conductor puede
optar por el modo por defecto, que prima el confort de marcha, y el modo deportivo, enfocado a la conducción más extrema.
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Es tanta la confianza depositada por Aston Martin en este sistema que se ha eliminado el Sport Pack para el modelo.
La potencia del nuevo DB9, sin embargo, seguirá brotando del V12 de 6.0 litros que entrega unos inalterados 470 CV a través del cambio manual de seis relaciones de serie o de la opcional transmisión automática Touchtronic 2 con levas en el volante. Con este propulsor, el DB9 acelera de 0 a 100 km/h en 4,6 y es capaz de alcanzar los 306 km/h.
Las primeras entregas del renovado Aston Martin DB9 empezarán el próximo julio, con precios que arrancan en las 122.445 £ de la versión coupé (unos 150.000 €) y las 131.445 £ de la versión Volante (160.000 € al cambio).