Cuando lanzó el primer Dacia Logan allá por el año 2005, Renault, propietaria de la marca rumana, se vio desbordada por el éxito de ventas que tuvo este modelo en mercados que, como el nuestro, se las daban de “elitistas”. Pensado en principio para ser una alternativa asequible para la movilidad en países de economías emergentes, no fueron pocos los clientes en otros lugares que supieron valorar el pragmatismo de sus planteamientos: tecnología conocida y probada más equipamiento suficiente a cambio de un precio de derribo.
La fórmula ha funcionado tan bien que en este tiempo la gama de Dacia se ha incrementado sustancialmente, e incluso se han atrevido a entrar en segmentos como el de los SUV con el Duster y, últimamente, en el de los monovolúmenes con el Lodgy, aprovechando las sinergias de la Alianza Nissa-Renault, que permite a la marca low cost adoptar la plataforma B0 (la misma de los Nissan Cube, Note, Juke y Leaf, entre otros) para toda su gama.
A pesar de que los Dacia hacían alarde de su sencillez, uno de los peros que se podían poner era el escaso atractivo de alguna de sus carrocerías. Al fin y al cabo, por muy práctico que se sea, cualquiera que se compra un coche necesita que le entre por los ojos. Pues éste ha sido uno de los grandes avances del nuevo Dacia Logan, un polivalente cuya carrocería de tres volúmenes ha ganado muchos enteros respecto a las angulosas líneas de su predecesor.
Gana en tamaño, 4.347 mm de longitud frente a los 4.250 mm del Logan original, lo que le permite mantenerse entre lo mejorcito del segmento en cuanto a habitabilidad y maletero, que mantiene los 510 litros de capacidad. Ahora, además, el respaldo trasero es abatible por partes 1/3-2/3 de serie. También se han mejorado los materiales aislantes y la sonoridad de los motores diésel, que cuentan con nuevos inyectores.
La gama de motores del nuevo Logan está compuesta por el 1.2 de cuatro cilindros que entrega 75 CV en sus dos variantes (una alimentada por gasolina y otra que también admite GLP) y dos diésel 1.5 dCi, una de 75 CV y otra de 90 CV.
El único nivel de equipamiento, denominado Ambiance, es prácticamente cerrado, ya que sólo admite las opciones de rueda repuesto en lugar del kit antipinchazos (81 €) y la pintura metalizada (260 €). Entre los elementos de serie se encuentran el aire acondicionado, cierre centralizado con mando a distancia, elevalunas eléctricos delanteros y radio-CD con mandos en el volante, entrada USB y manos libres Bluetooth, entre otros.
Versiones |
P.V.P. |
Dacia Logan Ambiance 1.2 75 |
8.950€ |
Dacia Logan Ambiance 1.2 75 GLP |
9.950€ |
Dacia Logan Ambiance dCi 75 |
10.350€ |
Dacia Logan Ambiance dCi 90 |
10.950€ |