El prototipo, llamado ix-Metro, se distingue por su propulsión híbrida, que permite a Hyundai augurar unas cifras de emisiones de 80 g/km.
El motor eléctrico comparte plataforma con un propulsor de gasolina de 3 cilindros en línea de alto rendimiento, con inyección directa, distribución variable CVVT (actúa sobre las válvulas de admisión y las de escape) y turbocompresor.
La transmisión se confía a una caja de cambios secuencial de 6 relaciones con doble embrague.