Llega el Mercedes-Benz Clase M más eficiente

Mercedes-Benz ya tiene lista la tercera generación del Clase M, el todoterreno que supuso la irrupción de las marcas premium alemanas en el mundo del 4×4 con ciertas aptitudes también sobre el asfalto. Tras su presentación al gran público durante el próximo Salón de Frankfurt, del 17 al 25 de septiembre de 2011, los concesionarios abrirán la veda a partir de la semana del 18 de noviembre.

Con cada generación el Mercedes-Benz Clase M se ha ido civilizando un poco más, y lo que nació como un automóvil de campo pero muy lujoso, ahora parece que está más cerca de lo que vendría a ser un SUV con buenas aptitudes fuera de la carretera.

Por de pronto, lo primero que Mercedes-Benz ha querido destacar de su nueva criatura silvestre es la sensible mejora en los valores de emisiones. Para ello, nada mejor que el ML 250 BlueTEC 4Matic, una versión que, gracias a las mejoras introducidas en el prolífico motor turbodiésel de 4 cilindros y 2.143 cc (lo hemos probado en el GLK 250 CDI y en E 250 CDI Cabrio), tiene homologada una cifra de emisiones de 158 g de CO2 por kilómetro recorrido.

La firma de la estrella está tan segura de las bondades de este propulsor, que por cierto también tiene cabida en el Clase S, que incluso compara en su propio comunicado los datos de su predecesor, el ML 300 CDI 4Matic BlueEFFICIENCY. Éste, con el antiguo bloque V6 de 3 litros, entregaba la misma potencia y par que el nuevo, 204 CV y 500 Nm, pero a cambio de 224 g/km de CO2. Lo mismo puede decirse de los consumos, que ahora en el ciclo combinado bajan un 28% y se quedan entre 6,0 y 6,5 l/100 km según equipamiento, cuando antes parecían razonables 8,4 l/100 km.

El otro motor diésel disponible inicialmente será el V6 de 2.987 cc, un bloque conocido que, sin embargo, ha sido completamente remodelado. Las cotas internas no se han tocado, pero el proceso de formación de las paredes de los cilindros es diferente. Lo denominan TWAS (twin-wire-arc spraying), y consiste en un sistema de recubrimiento metálico, usado por AMG en sus motores desde 2005, que permite una reducción de las fricciones internas y, además, la eliminación de las camisas de fundición gris de acero, con lo que se han ahorrado 4,3 kg.

Así, de los 231 CV y 540 Nm del anterior ML 350 CDI 4Matic, se ha pasado a 258 CV y 620 Nm en el nuevo ML 350 BlueTEC 4Matic. Con una media de consumo entre 6,8 y 7,4 l/100 km, resulta además un 24% más ahorrador que el modelo sustituido.

No menos significativas han sido las mejoras aplicadas en la única versión de gasolina disponible inicialmente, el Mercedes-Benz ML 350 4Matic BlueEFFIENCY. El hecho de añadir la etiqueta ecológica de Mercedes a este modelo ya da una pista de la evolución de esta variante.

A pesar de que las cotas internas del nuevo motor V6 de gasolina de 3.498 cc no varían respecto a las del anterior, se trata de uno de los miembros de la nueva familia de propulsores BlueDIRECT de la marca alemana. Dicho de otra manera, cuenta con la tercera generación de inyección directa, con inyectores piezoeléctricos capaces de trabajar a una presión de 200 bares, más encendido multichispa y combustión estratificada.

Traducido a cifras, esto viene a significar un incremento de la potencia de 272 a 306 CV, mientras que el par motor es ahora de 370 Nm, contra los 350 Nm del anterior. El ahorro de consumo vuelve a ser el dato destacado, con una media entre 8,5 y 8,8 l/100 km, todo un 25% menos.

Todos los propulsores cuentan, asimismo, con sistema de correas desacoplable y control de los componentes auxiliares y las bombas de agua y aceite, para que sólo estén en funcionamiento cuando son necesarios.

Además de la intervención en todos los motores, Mercedes-Benz ha incorporado de serie en el nuevo Clase M componentes propios del paquete BlueEFFIENCY, como la función ECO start/stop combinada con el cambio automático 7G-Tronic Plus mejorado, dirección asistida eléctrica, neumáticos de baja resistencia a la rodadura, etc.

En lo que se refiere al bastidor, la suspensión del nuevo todoterreno de Mercedes incorpora amortiguación selectiva, que se comporta de forma suave en conducción pausada o lenta, tanto en asfalto como en superficies moderadamente irregulares, pero que se endurece en el caso de realizar maniobras más exigentes.

Las variantes más potentes incluyen entre su equipamiento el programa off-road, que comprende el sistema de control de tracción electrónico ETS, además de un botón off-road que activa el modo de transmisión todoterreno, que reduce los puntos de cambio del 7G-Tronic Plus, mejora la sensibilidad del acelerador y activa el modo “campo” del ABS.

Para los que de verdad tengan intención de hacer incursiones serias por el campo con el Clase M, Mercedes-Benz ha desarrollado el paquete ON&OFFROAD. A primera vista, la diferencia más evidente se encontrará en la consola central, donde un mando giratorio permitirá elegir entre seis tipos de transmisión diferentes: Automática, Offroad 1 (para pistas y carreteras sucias), Offroad 2 (para situaciones más complicadas y pendientes pronunciadas), Winter (nieve, hielo, etc), Sport (si te va la marcha) y Trailer (con caravana).

Este paquete incluye también reductora y bloqueo del diferencial central, además de la suspensión neumática Airmatic, que permite variar la altura de la carrocería.

Puedes ver todas las imágenes del nuevo Mercedes-Benz Clase M en nuestra galería de fotos.