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El Opel Mokka es el primer contendiente del Nissan Juke, el crossover urbano con la que la firma nipona adaptó la filosofía del Qashqai al segmento B. Con este modelo, la firma de Rüsselheim aventaja al resto de marcas generalistas europeas, muchas de las cuales están todavía enfrascadas en el lanzamiento de rivales para el SUV de referencia entre los compactos (por ejemplo, el Peugeot 4008 o el Citroën C4 Aircross).
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Al militar en una categoría inferior, el Opel Mokka contará con una oferta de motores ajustada a lo que se suele ver en su segmento, compuesta por dos propulsores de gasolina (1.6 atmosférico de 115 CV con Start/Stop y 1.4 Turbo de 140 CV –que probamos en el Opel Meriva-), y un turbodiésel 1.7 CDTI Start/Stop con 130 CV y, más destacable para su cilindrada, 300 Nm de par. Dependiendo de la motorización, el Mokka puede incorporar tracción delantera o integral.
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La marca destaca de su próximo modelo su capacidad para albergar a 5 ocupantes, además de la versatilidad del sistema FlexFix integrado en el paragolpes trasero, un portabicicletas con capacidad para tres bicicletas.
La versión de acceso al nuevo SUV pequeño de Opel será el Mokka Expression 1.6 4×2 115 CV, con un precio de partida de 17.690 euros, mientras que la versión más cara será el Mokka Excellence 1.7 4×4 130 CV con Start/Stop, por el que pedirán 25.790 euros.
