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El nuevo Renault Mégane aterriza por fin en nuestro mercado después de haber sido presentado al final del pasado verano, en el Salón de París.
Las versiones de cinco puertas son las primeras que se comercializan, y deberían ser las más que tengan una mayor demanda.
En enero llegan los modelos con carrocería coupé, con la que el fabricante francés recupera el
espíritu más dinámico en su gama del segmento de los compactos. De esta forma sigue la misma estrategia que ya utilizó con el primer Mégane y que actualmente muestra Opel con el Astra y el Astra GTC. El
Volkswagen Golf está en el punto de mira del nuevo modelo, sin olvidar que tiene que compartir cartel con otros súperventas como el
Ford Focus, el Peugeot 308, el
Seat León o el Citroën C4.
Aparte de los nuevos rasgos de diseño, otros de los aspectos en los que la Régie ha puesto más empeño es en mejorar la calidad percibida (con nuevos materiales y especial atención a la acústica), las cualidades dinámicas y el equipamiento.
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El Mégane III ha crecido en todas sus cotas exteriores. Ahora tiene 4295 mm de longitud (86 mm más que antes) y su plataforma cuenta con una batalla de 2641 mm (gana 16 mm) y vías más anchas (28 mm delante y 33 mm detrás), que contribuyen por sí solas a
mejorar la estabilidad y el aplomo sobre la carretera. El coupé cuenta, además, con un centro de gravedad más bajo gracias a su menor altura. Ambos comparten una suspensión delantera tipo falso Mac Pherson con barra estabilizadora y triángulo inferior y una trasera con el tradicional eje
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elástico trasero, más ligero que el multibrazo que ya comienza a extenderse en este segmento. La puesta a punto del chasis, sin embargo, es específica para cada carrocería, ya que en
el Mégane Coupé se ha optimizado para darle un comportamiento más dinámico. Las combinaciones de ruedas de serie y las opcionales, con diámetros que van desde las 15″ hasta las 17″, y una dirección asistida eléctrica completamente nueva completan un trabajo
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En el interior, los ocupantes gozarán de una mayor anchura y los que ocupen las plazas traseras de una mayor distancia con los de delante. El maletero también es más grande y cuenta con 372 dm3 de capacidad (344 en el coupé), más un hueco de 33 dm3 bajo el piso del mismo, donde se aloja el
kit reparapinchazos de serie. Pese al incremento de medidas, el peso del coche, según Renault, es de media 8 kg. inferior, a igualdad mecánica y de equipamiento.
Variedad de motores
Los motores de los nuevos Mégane berlina y coupé serán, por una parte, el conocido 1.6 de 16 válvulas de gasolina, con 100 (sólo para el 5 puertas) y 110 CV, y el nuevo TCe de 2.0 litros y 180 CV (existe una versión de 130 CV que, de momento, no llegará a nuestro país). Esta motorización dispone de turbocompresor, igual que los tres diesel dCi common-rail de la marca, que tienen la potencia escalonada entre los 85 y 105 CV de los 1.5 y los 130 CV del 1.9. Las mecánicas impulsadas por gasoil se caracterizan por su bajo consumo de combustible y su contenida emisión de sustancias nocivas, que en el caso del más potente se queda en 134 gr/km. Durante 2009 se introducirán variantes más potentes, de 150 y 160 CV, que permitirán a Renault ofrecer una alternativa a los diesel tope de gama del Grupo Volkswagen o del Toyota Auris.
La combinación de estos propulsores con cuatro niveles de acabado, Authentique, Expression, Dynamique y Privilège, se convierte en una oferta inicial de 10 versiones diferentes del Mégane berlina, mientras que en el caso del coupé serán sólo 8, al prescindir del escalón más básico. Todos ofrecen de serie desde el aire acondicionado, regulador y limitador de velocidad o el ESP en la versión Authentique, hasta el climatizador bi-zona, las llantas de aleación, el sensor trasero de ayuda al aparcamiento o el radio-CD con lector MP3 y Bluetooth integrado para los modelos más equipados. Entre las opciones más destacadas están los asientos calefactables, el navegador, el techo panorámico, los faros bi-xenón y la rueda de repuesto del mismo tamaño que las de serie.
