Prueba Hyundai Santa Fe 2.2 CRDi Style: en otra dimensión

Prueba y opiniones por Gaby Esono

El Hyundai Santa Fe es, en nuestro mercado, el SUV de mayor tamaño de la firma coreana. En esta entrega está disponible solo con una carrocería de 7 plazas que, con sus 4,77 metros de longitud, se sitúa a medio camino entre las dos que se ofrecían en la anterior generación.

Sus dimensiones lo colocan, pues, en la parte alta de los coches camperos de las marcas generalistas, un segmento que ha desplazado claramente a los monovolúmenes grandes en las preferencias del gran público. Como es de imaginar, por tanto, la lista de posibles rivales está poblada de modelos notables como su primo el Kia Sorento, el recién llegado SEAT Tarraco, el Nissan X-Trail, el Volkswagen Tiguan Allspace o el SsanYong Rexton, por citar solo algunos ejemplos.

Cada vez más “europeizado”, el diseño del Hyundai Santa Fe sigue los patrones estéticos estrenado en el Hyundai Kona, pero no solo. Como coche familiar que es, la primera impresión que da es de una mayor elegancia en sus formas, menos rotundas que las de su predecesor. Es como si diera a entender que es un coche más refinado y menos rudo, más viajero y menos trotador.

Si, salvo ciertas y notorias excepciones, la tendencia de la firma asiática es la de hacer coches de talante cómodo, en el Hyundai Santa Fe este planteamiento alcanza su máximo exponente.

El SUV coreano es sobre todo un coche hecho para devorar kilómetros y kilómetros sin que apenas se note el paso del tiempo, ni de los baches. Sus suspensiones, no llegan a ser lo que se dice de un blando mareante, pero sí dejan claro que su prioridad es filtrar las irregularidades del asfalto.

Y atentos, porque digo asfalto. La tentación de probar sus cualidades fuera del oscuro elemento es grande, pero a poco que te adentras en caminos te das cuenta de que puede con lo que eches si no le complicas demasiado la vida, pero también te deja claro que se siente infinitamente más cómodo en vías rápidas que en caminos estrechos. Lo mejor de todo es que, a pesar de su notoria comodidad, su comportamiento dinámico aporta una mayor confianza de lo que cabría esperar de sus dimensiones y sus más de 1.800 kg de peso.

Para moverlos, los 200 CV de potencia y 440 Nm de par de su motor 2.2 CRDi se muestran bastante sobrados. Revisado para la ocasión -las cada vez más estrictas normas anticontaminación de la UE es lo que tienen-, hace gala de una gran suficiencia, más si cabe teniendo en cuenta que arrastra una gran carrocería, la tracción total (denominada HTRAC, inteligente y con bloqueo del diferencial central) y un nuevo cambio automático con convertidor de par y 8 velocidades. Este cuenta con levas en el volante y ofrece un funcionamiento muy bueno, suave y suficientemente rápido, siempre que recordemos que estamos conduciendo un SUV grande, no un pequeño deportivo.

Con todo ello, la marca presume de un consumo medio de 7,1 l/100 km y de unas emisiones de CO2 de entre 187 g/km. Yendo yo solo y sin carga, apenas conseguí bajar de los 8,0 l/100 km. De modo que a poco que carguemos el coche y no queramos que nos adelanten los camiones, dudo que sea sencillo mantenerse por debajo de los 9,0 l/100 km.

Subirte al Hyundai Santa Fe y sentirte como un rey en el trono es todo uno. Habitabilidad sublime en las 5 plazas principales, asientos amplios y cómodos, atractivo diseño del interior, acabados y ajustes de marca muy seria… Es para meter a tu cuñado dentro con los ojos vendados y grabar su reacción cuando, después de haberlo “sentido”, descubre que no está en un alemán de rancio abolengo.

Cuando decía que Hyundai ha europeizado al Santa Fe, me refería también, especialmente, al esmero con el que se ha tratado su interior. Habrá quien diga que no hay ninguna opción disponible (solo la pintura metalizada). Entonces habrá que responderle: ni falta que le hace, porque lleva de todo, oiga.

Tapicería de cuero, asientos delanteros con regulación eléctrica, calefactados y ventilados, techo panorámico, head-up display, cuadro de mandos digital que cambia de formato según el modo de conducción, sistema de información y entretenimiento con pantalla táctil de 8 pulgadas y compatible con Apple Car Play y Android Auto, cámara de 360 grados…

¿Hay algún pero? Pues sí, las dos últimas plazas. No es original, porque está por descubrirse el SUV de su segmento que iguale la capacidad de un buen mono volumen equivalente, pero lo cierto es que las plazas de la tercera fila de asientos no son aptas para realizar los largos viajes a los que invita este coche. Por tamaño no hay mucho problema, pero el acceso no es especialmente cómodo y el espacio disponible para las piernas solo es válido para niños. Como estos deben ir en una sillita, se pierde la ventaja.

El maletero, por su parte, ofrece unos muy razonables, que no excelsos, 547 litros de capacidad con la configuración de 5 plazas. Con la de 7 plazas se queda en unos simbólicos 130 litros, mientras que si ocultamos la segunda y tercera filas de asientos, se nos va a unos muy aprovechables 1.625 litros. Ideal mudanzas, mire usted.

El precio del Hyundai Santa Fe 2.2 CRDi 200 CV Aut. 4×4 Style es de 50.150€ (precio actualizado a enero de 2020). Se trata de una suma que empieza a ser ya elevada, aunque la marca un descuento de hasta 7.200€ sometido a diversas condiciones.

A cambio, se obtiene un coche con una gran capacidad rutera, habitabilidad y confort de primer nivel y un equipamiento de lo más completo.