Riñones a la bávara: el BMW X3 se come el campo con más refinamiento

Múnich (Alemania).- BMW llamó a unos cuantos medios de comunicación para mostrarles algunos de los detalles del nuevo X3, el SAV (Sports Activity Vehicle) que, hasta la llegada del X1, suponía el escalón de acceso a la gama campera de la firma bávara.

Aunque el X3 de segunda generación comenzará a venderse a finales de 2010 y hará su puesta de largo en el Salón de París el próximo octubre, la marca no quiso desvelar sus formas definitivas y, de momento, tenemos que contentarnos con mostraros estas fotos con camuflaje.

Lo que sí podemos contaros es que el nuevo BMW X3 crece en todas las medidas, ya que es 8 cm más largo (465 cm), 3 cm más ancho (188 cm) y 1,2 cm más alto (169 cm) que no lo hacen pasar por un X5, pero casi.

De hecho, ésta era una de las condiciones necesarias en la renovación del pionero entre los SUV compactos premium, que así gana empaque frente a sus rivales naturales, el Audi Q5 o el Mercedes GLK, o los «invasores» Volkswagen Tiguan y Ford Kuga.

Empaque y capacidad dinámica, al menos en carretera, gracias al incremento de la batalla en 1,5 cm (ahora la clava en 1810 cm, la misma que el Audi) y la de las vías delantera y trasera en 9 cm (163 cm y 165 cm aproximadamente cada una).

No sólo el dinamismo asfáltico sale ganando, sino que el interior se beneficia de un maletero de mayor capacidad, ya que con 70 litros más alcanza ahora los 550 litros. Por otra parte, los pasajeros traseros irán más holgados, gracias a los 2,3 cm de distancia extra para las piernas con la que cuentan en el nuevo X3, que además ha visto reducido el tamaño del túnel de la transmisión.

©BMW

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El BMW X3, que dejará de producirse en la planta austríaca de Graz para trasladarse a la que la firma de Múnich tiene en Carolina del Sur (EEUU), estará disponible inicialmente con dos motorizaciones: el diésel tetracilíndrico 2.0 de 184 CV para el X3 20d, y la última versión del 3.0 de seis cilindros en el X3 35i que, dotado de un turbocompresor e inyección directa de gasolina, entrega 306 CV y 400 Nm de par motor.

En ambos casos, se presume de una sensible reducción de los consumos (un 15% y un 9% respectivamente), gracias a la incorporación de la filosofía EfficientDynamics a toda la gama del todocamino alemán. El sistema Start&Stop de serie para todas las versiones, así como el dispositivo de regeneración de la frenada en las retenciones juegan un papel clave en este logro, así como la ligera reducción del peso, a pesar del incremento de las dimensiones.

De estas mejoras también se beneficiarán las mecánicas que vayan llegando, entre las que se contempla otro seis cilindros de gasolina, el X3 28i con 256 CV que llegará en enero de 2011. Para completar la oferta diésel habrá que esperar a la primavera de ese año, que es cuando está previsto que llegue el primer seis cilindros con cerca de 260 CV en el X3 30d, que serán 306 CV en el X3 35d que no llegará antes de septiembre. A más largo plazo, se espera un moderno bloque tetracilíndrico de 2.0 litros que destacará por sus valores en eficiencia.

Todas las variantes mecánicas de seis cilindros irán asociadas de serie a la tracción total inteligente xDrive de BMW y a un cambio automático de 8 velocidades, mientras que los bloques más pequeños podrán acceder a este tipo de cambio opcionalmente, en lugar del manual de 6 relaciones previsto.

Entre sus equipamientos opcionales, destacará el chasis adaptativo, que permitirá modificar los parámetros de funcionamiento de la suspensión, dirección, respuesta del acelerador y rapidez del cambio.