Con estos 150 nuevos puestos de trabajo, a finales de 2009 la firma de Goodwood habrá creado 400 empleos en dos años, llevando el total de la plantilla hasta los 900 trabajadores.
El Rolls-Royce Ghost será fabricado en una línea de producción propia, aunque compartirá algunas etapas de pintura, tapizado y montaje con la línea del Rolls-Royce Phantom. La producción del Ghost se iniciará el próximo otoño, para realizar las primeras entregas a los clientes a principios de 2010.