A falta de poder presentar un modelo completamente nuevo en el Salón de Ginebra 2014, Opel ha optado por ofrecernos dos versiones muy especiales de coches ya conocidos. El primero es un concept derivado del Opel Astra OPC, apodado OPC Extreme. Y no lo han hecho en vano.
Y es que el Opel Astra OPC Extreme es, según explican desde la marca, una variante del Astra OPC Cup destinado a las copas monomarca. Es, por tanto, un coche prácticamente de competición adaptado para poder ser matriculado y circular libremente por la calle. Más o menos, porque desde luego desapercibido no se pasará con ninguna de las pocas unidades que está previsto producir en serie.
Puesto a punto por OPC, el departamento que se ocupa de las versiones más radicales de Rüsselheim, el Opel Astra OPC Extreme ha sido aligerado en nada menos que 100 kg y está dotado con un motor de más de 300 CV, asientos tipo bucket, estructura de seguridad y arneses de seis puntos. O, lo que es lo mismo, podría correr en circuito sin mayores modificaciones.
Otro punto de vista bien distinto plantea el Opel Adam Rocks, una versión crossover del pequeño urbano de la marca alemana, que además de una estética claramente distintiva respecto al resto de los miembros de la gama, se será el primero en incorporar el propulsor tricilíndrico de nueva generación, un 1.0 Ecotec Turbo de inyección directa de gasolina de 115 CV de potencia y 166 Nm de par motor.