El GranCabrio es un inequívoco ejemplo de ello. Su estilizada silueta descapotada, diseñada por el mago Pininfarina, y su potente motor V8, con 440 CV suministrados al eje trasero a través de una eficiente caja automática ZF de seis relaciones, componen un escenario al que sólo le falta darle un poco de movimiento.
Nueva victoria del qatarí en una jornada en la que Carlos Sainz ha vuelto a tener problemas mecánicos que le han hundido definitivamente en la general.