Inaugurado en 1938, lo que más sorprende de Bathurst es que se siga utilizando hoy en día. Con 174 metros de desnivel, un par de rectas de cerca de dos kilómetros y una sección de descenso a tumba abierta llena de curvas ciegas y sin escapatorias, ha resistido el paso del tiempo y de las normativas de seguridad. Los 1.000 km de Bathurst son todavía hoy el evento automovilístico más importante de Australia.
En el vídeo, el récord de vuelta conseguido por Greg Murphy en 2003, sólo superado en 2010 por Craig Lowndes (uno de los tres pilotos australianos con los que cuenta Audi para las 12 Horas de Bathurst) con una vuelta de 2:06.8012.